Por: Amparo Balbuena
Es la disolución del matrimonio, mientras que, en un sentido
amplio, se refiere al proceso que tiene como intención dar término a una unión
conyugal. En términos legales modernos, el divorcio fue asentado por primera
vez en el Código Civil francés de 1804, siguiendo aquellos postulados que veían
al matrimonio como una verdadera unión libre para contraerlo el cual basta con el
acuerdo libre de los esposos en consecuencia el divorcio es una necesidad natural;en este
sentido, el divorcio moderno nace como una degeneración de un matrimonio
vincular cristiano, transcurriendo la lógica de la secularización de éste,
teniendo raíces provenientes del Derecho Romano.
El divorcio se diferencia de la separación de
hecho debido a que depende del ordenamiento
jurídico de cada país, puede tener o no algunos efectos jurídicos; por ejemplo
para los casos de Chile esta situación fáctica puede ser causal para así ser
solicitada la declaración de divorcio.
Respecto a la separación legal , ésta sí es
reconocida legalmente en diversos ordenamientos jurídicos, teniendo en
consecuencia un mayor número de efectos jurídicos que la separación de hecho,
aunque a diferencia del divorcio, no pone término al matrimonio.
Sin embargo, el divorcio ha causado grandes
polémicas en los países mayoritariamente católicos, pues la Iglesia Católica
no considera posible el divorcio. Manteniendo la consigna lo que Dios une que
no lo separe el hombre ´´.
El divorcio no se debe confundir con la anulación
del matrimonio, que no es más que
declarar el matrimonio que nunca
existió, y que no solo se encuentra normado en el ordenamiento jurídico de
algunos países, sino que, además, se encuentra regulado en el derecho canónico
con larga data.
CAUSAS PSICOSOCIALES Y ECONOMICAS DEL DIVORCIO
Diversas investigaciones han tratado de
determinar cuáles podrían ser las variables que presentan un mayor riesgo de
divorcio, aunque no necesariamente se puede presumir que son aquellas las
causales directas de éste. Entre estos factores, se pueden mencionar:
matrimonios a corta edad, pobreza, desempleo, bajo nivel educacional, convivencia
con otra o la misma pareja antes del matrimonio, tener un hijo o hija antes del
matrimonio ya sea propio de ambos o de alguno de los contrayentes, diferencias
raciales tener un historial de otros matrimonios anteriores, divorcio en la familia
de origen, entre otros.
En contraste las causas del divorcio de cada país
varían en función de su ordenamiento jurídico, pudiéndose encontrar:Violencia intrafamiliar:lesiones, injurias, violencia verbal, psicológica o físicas adicciones: que afecten al núcleo familiar o a alguno de
sus integrantes adicción a drogas, juegos,ser sentenciado a pena corporal por delito grave que no
alcance el beneficio de libertad bajo caución o fianza,adulterio, Bigamia,incitar u obligar a cualquier integrante a cometer un
delito,conductas que ponen en peligro la integridad física o
psicológica de cualquiera de los integrantes de la familia.Otros de los factores causante del divorcio es el abandono injustificado del hogar infecciones de transmisión sexual incurables,falta de cumplimiento intencional a las obligaciones alimentarías y délitos cometidos en contra de uno de los cónyuges o de los
hijos.
Otras investigaciones indican que una de las
potenciales causas en el incremento de las tasas de divorcio ha sido el cambio
de roles dentro del matrimonio, principalmente asociado a la incursión de las
mujeres en el mercado laboral gracias a crecientes oportunidades en educación y
empleo en conjunto con políticas más activas de inclusión, indicando esto que
en muchos casos, la relación entre un mayor número de horas dedicadas al
trabajo y la probabilidad de divorcio es más fuerte.
En aquellas familias de ingresos medios y en las
que el esposo desaprueba el trabajo de
la esposa o bien, en las que el marido trabaja menos horas que la esposa haciendo
que la interacción de pareja disminuya, especialmente en el caso de los
primeros años del matrimonio.
Por otro lado, respecto a la independencia
lograda por la mujer al acceder al mundo del trabajo, varias investigaciones
aluden a la existencia de una débil relación con la probabilidad de divorcio.
Causas bastante raras pero a veces no menos
frecuentes son el ronquido insoportable de uno de los cónyuges, falta de
higiene personal, adicciones a distracciones, política, deportes o hobbies.
LA FAMILIA, EL DIVORCIO Y SUS CONSECUENCIAS
El divorcio no es el problema, sino el resultado
es decir traerá como consecuencia un
conjunto de inconvenientes, desavenencias y problemáticas vividas en el
contexto del matrimonio que puede radicar con uno y ambos cónyuges, catalogándose por un sinnúmero
de investigadores como el segundo proceso más estresante durante la edad adulta.
Algunos autores, tomando como elemento de
análisis al adulto divorciado que es padre y/o miembro de la familia, indican
que el divorcio es el gran responsable de las profundas alteraciones que sufre
el sistema familiar post divorcio, obligando a sus subsistemas a reorganizarse
estructuralmente; en efecto, para el caso de los hijos/as por señala que la capacidad que estos tienen
respecto a su funcionamiento adaptativo dependen no solo de las características
del sistema familiar existente durante el matrimonio, sino que también de las
relaciones co-parentales que se dan después de finalizado el proceso de
divorcio.
Por otro lado, varias investigaciones afirman que
el proceso de divorcio impactaría en el bienestar de los niños/as, asociándose a
algunos problemas que éstos externalizan, tales como comportamientos agresivos
o tendencia a quebrar reglas, mientras que a nivel interno, con problemas de
ansiedad y depresión.
FORMAS EFECTIVAS DE PREVENIR EL DIVORCIO
En la sociedad el número de
divorcios es cada vez mayor, pero muchas de las parejas que llegan a esta
instancia desearían poder reconciliarse. Para lograr una reconciliación, es
necesario reflexionar acerca de la relación y cambiar de actitud.
La tasa de divorcios va cada vez más en un aumento constante, sin embargo muchas de estas
parejas, podrían evitar esta situación al
reflexionar seriamente acerca de la relación, o en el preciso momento de acudir a las terapias de pareja.
En todo matrimonio se dan conflictos que amenazan
la relación, pero la mayoría de las parejas cuenta con elementos para
superarlas. Son las parejas que no saben cómo solucionar dichos conflictos las
que llegan al divorcio, aunque en muchos casos, no desean llegar a esta
instancia.